Nuestro cofrade más aventurero, Daniel Philibert, en uno de sus viajes a Tailandia, se ha inscrito en un cursillo de cocina. Entre los platos típicos que ha visto  preparar  a los profesionales que le acompañaban, el más exótico es uno de “cangrejo herradura”, una  especie de fósil viviente. Solo puede ser manipulado por chefs nativos muy experimentados, ya que en su interior se encuentra una bolsa con un veneno mortal. Sus huevas de color verdoso, mezcladas con ensalada, son consideradas por los tailandeses como una auténtico manjar.

 

     

  

 

 

El Cangrejo Herradura es un xifosuro, cuyo nombre científico es “Limulus polyphemus”, se encuentra en período de extinción y su sangre es muy apreciada para la elaboración de productos farmacéuticos. Parece ser que tras la extracción, el animal se recupera en breve tiempo.