Según datos del Archivo Municipal de Irun, en 1673 existían en Irun seis ermitas: Santa Elena, San Marcial, San Antonio Abad, Artiga, San Antón y Santo Cristo de Elizatxo.

La antigua ermita del Santo Cristo de Elizatxo se encontraba en el barrio de Lapitze, junto al camino Real que se dirigía desde Ventas al Alto de Olazabal.  .

Es posible que, al ser paso obligado de los peregrinos de Santiago, hubiera tenido en su época cierta relevancia.

Grabado de lo que pudo ser uno de los tramos del camino Real,

junto al cual, a su paso por Irun, estuvo la ermita de Elizatxo.

Una de las primeras referencias encontradas de la ermita de Elizatxo data del año 1603, en el que aparece como serora María Juan de Arana.

Otra noticia de la ermita, por cierto sumamente triste, encontrada en el Archivo Municipal de Irun,   data de 1705, cuando una niña recién nacida apareció abandonada en su interior.

En 1708 la ermita amenazaba ruina, por lo que hubo de apuntalarla y rehacer alguna de sus paredes, ascendiendo a ciento noventa y un reales de plata los gastos de reparación realizados.

En un manuscrito que trata asuntos de Irun del año 1710 al 1714, se dice que "el maíz que se haya recogido en la postulación para la basílica del Santo Cristo de Elizacho, se emplee en hacer un frontal para el Altar Mayor..."

Tenía la ermita una campana que en 1714 fue refundida por el maestro campanero Antonio de Palacio. Por estar rajada, volvió a refundirse en 1760, trabajo que recayó en el maestro Manuel de Corrales, quien al mismo tiempo rehizo las campanas de San Marcial, San Antón y una nueva para la Casa Consistorial.

Sobre la ermita del Sto. Cristo de Elizatxo se dice en 1760, que en ella ‘se hacen únicamente las procesiones de los primeros días de las tres rogaciones’ (las que se realizaban en determinados días, para el éxito de las cosechas).

Como era habitual, las iglesias y ermitas contaban siempre con una serora que se ocupaba del cuidado de las mismas y  a las que se facilitaba una modesta vivienda accesoria.

La última serora de la ermita de Elizatxo fue María Josefa de Arbide.

Se sabe que la ermita dejó de tener culto en 1769.

En 1775 el viejo edificio de la ermita así como su casa seroral estaban muy próximas a su fin y, el 30 de abril de aquel año, el alcalde se vio obligado a su demolición por la ampliación para carruajes del camino Real, que desde el prado de la Casa de Oña debía ir hasta Errementari (lugar ocupado hoy en día por el Ambulatorio Central (antes "Hermanos Iturrino") de la Avenida de Gipuzkoa).

Tras la demolición, la imagen del Santo Cristo fue trasladada la ermita de Santa Elena.

Lamentablemente, la de Elizatxo es la única de las seis ermitas históricas de Irun de la que no ha quedado rastro alguno.

Fuentes:

Archivo Municipal de Irun.

Catálogo del Patrimonio Arquitectónico y Arqueológico de Irun.