GUTIÉRREZ, FRANCISCA
Tal vez el nombre no les diga nada, porque todos la recordamos como “Paca”, la castañera. Paca, junto con Emilia quien a veces le acompañaba, eran las castañeras de antaño que subían de la calle Santiago empujando su peculiar puesto de venta: una locomotora de hojalata. Cuando se acercaban las Navidades instalaba su carromato e la plaza Genaro Echeandia, en el triángulo comprendido entre la pastelería Aguirre, la desparecida “visera, y la tienda de tejidos Idarreta. Imágenes de una época en la que, junto al acceso a los aseos públicos subterráneos, componían un conjunto abigarrado, un poco pueblerino pero entrañable.
Plaza Genaro Echeandía en los años 50. A la derecha de la imagen el acceso a los antiguos "excusados" subterráneos.
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