Tras varios meses de obligada inactividad, la Banda de Pífanos y Tambores de la Cofradía Anaka pudo desempolvar sus instrumentos en una actuación privada que tuvo como escenario el monte Igueldo donostiarra.

En esta ocasión estuvieron acompañados por miembros de la Asociación 31 de Agosto.

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Fotos: Amaia  Ibeas