MOJONES
ALGUNOS MOJONES QUE MARCAN LOS LIMITES DE IRUN CON HONDARRIBIA
A través del Barrio de Anaka pasa la línea de amojonamiento que marca la divisoria con la vecina Hondarribia. Estos son los mojones y su situación según se hace constar en el plano editado por el Asilo de la Beneficiencia en el año 1901. Aunque en estos mojones no tienen marcada físicamente la numeración, en el mencionado mapa llevan asignados los números 67 a 72.
PLANO Y LINEA DE AMOJONAMIENTO EN 1901
PLANO Y LINEA DE AMOJONAMIENTO EN 2011
Estos son los mojones que marcan el límite de Irun con Hondarribia y su situación extractada del buscador geográfico de la Diputación Foral de Guipuzkoa
MOJON 67 Se encuentra al borde de la regata de Jaizubia junto al viejo molino y el palacio de Urdanibia que se ve al fondo. Este mojón presenta la particularidad de que está colocado al revés. Es posible que como consecuencia de alguna riada hubiera caído y los responsables de recolocarlo no tuvieron en cuenta la "Y" que corresponde a Irun y la "F" a Hodnarribia, cambiando la orientación de la piedra.
MOJON 68 Se encuentra en la campa junto al remozado caserío "Gebara", frente al actual Hospital Comarcal del Bidasoa, al otro lado de la carretera. En la parte orientada a Irun, se observa la "Y" de Yrun, lo que da una idea de su antigüedad. Al fondo el monte Jaizkibel. En la otra cara puede verse, en la parte superior, la "F" de Fuenterrabía. Al fondo "Gebara" y los tejados de "Peña Enea"
MOJON 69 Se encuentra en una pequeña isleta junto al Colegio Público de Anaka, en la calle Pagogaina, a escasos metros de la puerta de acceso a la finca de Zubieta. En la imagen puede verse la "H" que delimita el territorio de Hondarribia. En su cara opuesta una "I" de idénticas proporciones con el monte Jaizkibel de fondo.
MOJON 70 De este mojón tan solo podemos ofrecer la cara que muestra la "H "de Hondarribia. La correspondiente a Irun se encuentra incrustada en el muro de uno de los terrenos que delimitan las viviendas que se encuentran en las inmediaciones del caserío Aristi.
MOJON 71 Donde antaño posiblemente hubo un mojón eliminado por las posteriores edificaciones, existe una losa incrustada en la acera con las iniciales I / H separadas por una línea que marca la dirección del mojón anterior y que "atraviesa" la vivienda que se observa en la foto. Se encuentra en una de las aceras de la Avda. Letxunborro .
MOJON 72 Se encuentra en la zona que antiguamente se conocía como Zubimusu, ahora Mendelu. A escasos metros de lo rotonda que une la calle Fuenterrabía con la avenida de Letxunborro.
AVISO A DESERTORES
Se trata de un mojón que se encontraba al borde del camino que unía los caseríos de Gebara Berri y Letxunborro, por consiguiente en la misma línea divisoria de Irun con Hondarribia. En los años sesenta, y con motivo de las obras de ensanchamiento de la carretera fue arrancado de su lugar, quedando tirado sobre uno de los taludes laterales donde permaneció mucho tiempo olvidado. Un Buen día, un insigne irunés, D. Jaime Rodríguez Salís, por aquel entonces propietario del caserío Letxunborro, lo recogió y guardó notificando de ello al Ayuntamiento de Irun. Esta es la referencia que hemos encontrado entre los trabajos de carácter histórico que Ricardo T.Berodia viene presentado en su blog "Bidasoa Txingudi". El origen de este mojón se remonta al siglo XVII y en él, a duras penas, se puede leer:"DESDE AQUI LA DESERCION TIENE PENA DE LA VIDA". En aquella época debía ser muy frecuente la deserción a Francia entre los soldados que guarnecían la frontera, y de ahí lo disuasorio de la inscripción. Corresponde al número 69 del plano de 1901 que más abajo se reproduce. Dada la dificultad de lectura que presenta el mojón encontrado en Anaka, traemos a esta página otro de idénticas características y texto que aún hoy día se encuentra en el paraje denominado Soroeta, al pie de la carretera que pasa entre los montes de Erlaitz y Pagogaina. PARA SABER MÁS. Los mojones eran generalmente de piedra, de tamaños variados dependiendo de su relevancia. La piedra utilizada era diferente en su color y composición para resaltarlo en el medio que los rodeaba. Para su colocación se cavaba un agujero de cierta profundidad, depositando en el fondo fragmentos de carbón y tejas, recurso al que se apela cuando habiendo desaparecido el mojón se quiere hallar su posición.
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