Los primeros datos encontrados datan de 1653 donde se cita a Marcos de Echeverria en los honores de paz y guerra tras presentar sus millares (había adquirido de su hermana Isabela de Echeberria las tierras de Chuantenea).

En sus cercanías hubo desde siempre unos terrenos concejiles con gran abundancia de robles. Así encontramos en 1708 "Que en las tierras concejiles junto a Chuantenea se planten robles y se quiten los castaños". Más tarde en 1723 se habla del " plantío de 19 robles entre Choantenea y Larzaval del vivero de Adame de Choperena"

En 1762 hay constancia de multas a varios vecinos por cortes indebidos en el "robledal del paraje de Chuantenea o Anaca " (sic)

Este caserío se encontraba a los pies de Mendibil, en el viejo camino a Fuenterrabía, en lo que ahora conocemos como calle Cipriano Larrañaga, muy cerca de la desaparecida plaza de toros.

"Txoantenea" podría traducirse como "el de Juan".