Manolo Larraza
Y es que Manolo, "Lolo" para los amigos, fue todo un ejemplo en la "Compañía Internacional de Coches Cama". Entró trabajar en 1955, de limpiador. Pasados dos años ya era conductor y en ese puesto estuvo hasta su jubilación en 1995. Media vida metido en un tren visitando ciudades como Madrid, Lisboa, Oporto, París, Coruña... Alternaba las rutas con otros compañeros del Barrio como Baltasar Ugarte, Santiago Arrieta... La ruta más esperada era la que tocaba Portugal, porque les permitía obtener algún ingreso ´extra´ con las pequeñas partidas de café que de vez en cuando compraban en Oporto y Lisboa y que luego revendían tras pasar la frontera. En cierta ocasión tuvieron un buen susto. La Guardia Civil, en un registro sorpresa con parada en Valladolid, les requisó parte de su tesoro, teniendo que pagar una pequeña multa. Los sueldos no eran malos para la época, pero aquel pequeño trapicheo, unido a las propinas de los clientes, suponían un plus para sus familias. Afortunadamente, a lo largo de sus cuarenta años de servicio y miles de kilómetros recorridos, no fue testigo de ningún accidente, ni tan siquiera un simple descarrilamiento. Nos habló de los uniformes que la Compañía les proporcionaba. Eran en color azul para los recién entrados, el blanco para encargados del servicio de mesas y el marrón para los conductores, entre los que se encontraba Manolo. El uniforme lo completaba un bonito "kepi" para la cabeza, con el logotipo de la Compañía bordado en dorado. Era el típico gorro de los ejércitos franceses. Por su estatura, cada vez que Manolo se lo colocaba nos recordaba al general De Gaulle.
Kepi y logotipo de la Compañía.
Antiguas instalaciones de Coches Cama en Anaka.
|