La comprendida entre las calles Hondarribia y Zubiaurre.

En realidad no se trata de una plaza tradicional, sino más bien una calle.

Consultados los padrones de habitantes, hasta la década de los años 60 no aparece esta plaza. Todo hace pensar que como la zona del entorno era conocida con barriada de San Miguel, a esta plaza se le conociera por el mismo nombre, y así ha permanecido sin que  se le haya asignado de forma oficial.

En 2019 sufrió una impactante transformación, incluida en la renovación del entorno de la calle Hondarribia, en la que destaca un impresionante mural pintado con la técnica del "trampantojo",  realizado por el estudio Arte y Muralismo. Se trata de una ilusión óptica que evoca la prolongación de la fachada de una calle con dos edificios y una escalera que asciende hasta un tercer inmueble.

Dentro de la renovación de este enclave, se colocó una escultura que recuerda la llegada de emigrantes a Irun en el siglo XX.

La escultura fue realizada por la Fundición Artística Jaizkibel, la misma que forjó la figura de la cantinera que está junto al Museo Oiasso.

Antes del desarrollo de la zona de San Miguel (1956-1959)

Foto: Archio Municipal de Irun. Colección de J.M. Castillo

Escultura que evoca la llegada de emigrantes a Irun en el siglo XX