La que va desde la plaza Urdanibia, pasa por debajo de la avenida de Navarra hasta la calle Santiago.

Así era conocida la calle ya en 1859, por estar situada al borde los juncales que se extendían en la ribera del actual canal de Dunboa y cuantas tierras anegaba antaño el río Bidasoa a su paso por Irun.

Los terrenos juncales tuvieron a lo largo de los siglos una gran importancia, ya que las zonas bajas del término municipal junto al agua estaban ocupadas por esta planta silvestre.

Al ir agregándose terreno al río e irse roturando las marismas, se fueron dando concesiones para la explotación de los terrenos ganados al agua, existiendo por ello, a veces, grandes disputas entre Irun y Hondarribia por la concesión de explotación de los mismos.

Por otra parte la patrona de Irun lleva también esa advocación porque la leyenda dice que la imagen de la Virgen apareció en un juncal hacia el siglo XII ó XIV.

En 1851 este era una camino que discurría por las propiedades de Juan José de Olazábal, quien accedía a que fuera utilizado públicamente, si bien exigía al Ayuntamiento le otorgara un documento en el que se hiciera constar quien era el propietario.

Calle Junkal. Año 1970.