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EPISODIO 3
El enemigo se encuentra a orillas del Bidasoa, pero no pueden cruzarlo por estar la marea alta. Al bajar ésta, a las 8 de la mañana del 2 de octubre, con el río ya con poca profundidad, el conde de Guise, Claudio de Lorraine con los franceses y lansquenetes pica en mano, comienzan a atravesar el Bidasoa. En la orilla irunesa, los guipuzcoanos al mando de Diego de Vera, capitán general de Gipuzkoa, los esperan, pero ante la superioridad francesa y tras los primeros choques, van cediendo terreno siendo superados por la vanguardia de lansquenetes e inician la retirada hacia Hondarribia perseguidos por el enemigo, que de momento no ataca el castillo de Behobia, pero alojándose esa misma tarde en Irun, donde no hallan a nadie, ya que todos sus vecinos han escapado a los montes cercanos. Los invasores permanecen en Irun mientras hacen pasar el río cuatro cañones y algunas bastardas o culebrinas que colocan apuntando a la fortaleza de Behobia, que deben tomar para permitir el tránsito libre de los víveres y gente que viniese de Francia. Entretanto, Herná Pérez de Yarza, viendo que no llega ayuda alguna, ha puesto a punto la fortaleza levantando una pared a cal y canto, con puerta y dos pequeñas troneras para proteger las bombas y municiones. En los pisos inferiores construye unos depósitos para almacenar pólvora, harina, aceite, tinas para salar carne y un barril de vinagre. Se provee también de leña y otras menudencias y algunos animales. De todo ello se levanta acta notarial ante el escribano Juan de Zozaia, el 6 de abril de1521.
Ballestero y espingarderos hacia 1493. Álbum de la Infantería Española, Conde de Clonard. Lám. 24
(Continuará…)
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