AGUSTIN IBAÑEZ

 

Nuestro cofrade Agustín ha sido feliz entre marmitas de cualquier guiso, si son de Marmitako, mucho mejor. Fuera de los fogones disfrutaba con un redoble y un par de buenas baquetas. Durante muchos años acompañó a grupos de trikitixa  amenizando con  su batería  numerosas billeras.

Lamentablemente, desde hace algún tiempo, una penosa enfermedad le mantiene aislado de la vida activa.